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King of App

¿Tú eres más de papá o de mamá?

Pregunta trampa donde las haya. Y es que seguramente, como en la vida misma, no es cosa de querer más a uno que a otro sinó de valer en su justa convivencia. Efectivamente, no hablamos ahora de personas sinó de papá teléfono o de mamá tablet. ¿Tú de quien eres más?

Lo lógico es que, de base, todos respondamos al unísono: de papá. Claramente, sin el teléfono no somos nadie y sin la tablet, pues… La tendencia generalizada es a pensar que con un dispositivo móvil ya es suficiente y la opción más clara pasa por el smartphone. Sea como sea, llamar a alguien o enviarle un mensaje aún es más cómodo mediante un teléfono que utilizando una tableta o incluso un 2 en 1 como los phablets (híbrido de tableta y teléfono).

En todo caso, lo que se tiende a valorar es a qué se le puede sacar un mayor provecho al menor coste posible y, por el momento, el móvil gana por goleada. Sin embargo, las ventas de tabletas aumentan año tras año. El último informe publicado por la firma analista IDC revela un crecimiento del 6,5% para este año para llegar a las 233 millones de unidades vendidas.

Números nada desdeñables pero que quedan lejos tanto de las previsiones iniciales (fijadas en un crecimiento del 12%) como del volumen de teléfonos vendidos que llegó a las 300 millones de unidades al cerrar el segundo trimestre del presente ejercicio. Pero es que analizando tanto las tendencias de consumo como las sociales, quizá, el máximo competidor de las tablets no es el teléfono.

Con sus similitudes, móvil y tablet comparten espacio, conviven en cierta armonía. Sin embargo, parece que hay otro dispositivo que debe temer por su posición en el mercado y no es otro que el ordenador. Si ya los dispositivos de sobremesa padecieron la irrupción de los ordenadores portátiles a un precio razonable parece que ahora las tabletas han llegado para arruinarles completamente la existencia a unos y otros.

La tablet ha entrado por la vía más rápida, la que todo invento anhela. Ha accedido a nuestras casas y a nuestras vidas  apoderándose de un elemento tan importante en nuestras casas como es el sofá con lo que el ordenador se ha visto relegado a su simple utilización en el ámbito profesional. Con ello, la tablet se queda con nuestro ocio y el ordenador se reserva para trabajar. Y ya sabemos todos que el ocio es sagrado por lo que parece que esta guerra ya tiene, a la larga, un ganador claro. Y las cifras así lo demuestran, ya casi se venden tantas tablets como ordenadores.

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