La Navidad ya ha pasado pero sus efectos nocivos, no. Es ahora cuando nos damos cuenta de la factura que pasan los atracones y los excesos, pero también es ahora, con la perspectiva de los días pasados, cuando también nos damos cuenta de lo peligrosos que pueden llegar a ser según que regalos. En ello, un teléfono móvil es una arma de doble filo; muy útil para según que cosas pero extremadamente peligroso en manos de un adolescente descerebrado. Por ello, desactivar según que opciones puede ser imprescindible. Pero, ¿y si además pudiéramos ver en tiempo real lo que hacen nuestros hijos con sus teléfonos?
La solución a esta pregunta nos la ha dado Movistar con una App, Smart Kids, que permite acceder a los contenidos de un teléfono móvil de manera remota.
Smart Kids es una App de doble instalación. Es decir, debe instalarse en el teléfono del menor y también en el de los padres. A partir de ahí la configuración permite no sólo saber en tiempo real qué uso hace del teléfono el menor en cuestión sino también delimitar una zona de acceso al mismo. Con ella se puede marcar que la criatura sólo pueda acceder al teléfono, por ejemplo, dentro de casa y se active un aviso por SMS al hacerlo fuera de ese radio de control.
Por otro lado, la app permite también crear entornos seguros de navegación. Con ellos se limita el acceso de contenidos para que únicamente puedan consultar unas determinadas páginas. También resulta muy útil la opción de limitar el tiempo de juego para que dediquen su tiempo libre a más cosas que no sea estar pegados a la pantalla de su nuevo y flamante smartphone.
Todas estas opciones de control para el uso racional del teléfono móvil tiene, sin embargo un coste mensual que va en función de los teléfonos móviles a los que se quiera instalar la aplicación.
